Nº visitas

martes, 25 de enero de 2011

Navidad.

Yo no parezco un idiota,
un olvidado islote,
ni mi marca de marrón me define por mi dosis matinal.
Yo desprecio cada día de este espacio
y, normalmente, interrumpo a los autores para ayunar con ellos
a esos estúpidos lectores.
Por mi idea de vivir nadie nunca me ha reído;
es de ver, en consecuencia, que me crea.
Si de todas las palabras que escupí no me besaste,
es de ver,
en consecuencia,
que no puedas detenerme;
porque es posible que kioscos donde duermen
cepillos y dinero
sean sitios una noche
para amarnos otros;
para amarnos al.
Deja que me escriba
antes de darme la lista de la compra;
y del cambio que te traiga no me dejes ni la ropa.
Y demuestra a mi bolsillo que comprarte no fue
necio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario