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domingo, 8 de mayo de 2011

Esta mañana.

Esta mañana el mundo fuera de las mantas estaba frío, frío, frío como si nadie se hubiera acordado de encender las paredes. Todos mis pies se empeñaban en hacerme sentir vivo, y de pronto me acordé de que tú necesitabas verme.
Saliendo por la puerta me di cuenta de que vivías tremendamente lejos, y de pronto supe que Somalia existe y de que en algún lugar del mundo aún hay tifus. Es uno de esos momentos en los que sientes enfermedades que nunca podrás sufrir por tu nivel adquisitivo, al que me refiero. Por algún despiste de los míos se me olvidó no pisar ese charco, y todavía, cuatro horas más tarde, recuerdo el sonido y la sensación de ver a tu abuela moribunda.
El autobús llegó a tiempo, y por eso pude estar en tu casa sólo tres horas más tarde. Por supuesto, a ti se te había olvidado que venía, pero con eso ya contábamos. Pronto preguntaste que si de verdad había ido. Yo no respondí, y volví a buscar otro autobús para seguir sintiéndome incompleto.
Luego, cuando ya no parecía que fueras a verme más, cuando ya la frontera con Andorra estaba cerca y tú ya no olías mi cuello ni te abrazabas a mí para mantener el equilibrio, los doscientos pasajeros del autobús se dedicaron a la cómoda tarea de mirarme fijamente mientras me miraba las manos.
Los cristales vibraban mientras intentaba recordar esa invención de Bach que solía tocar en tus mejillas. Me cago en la puta, qué poca falta me hace todo este frío.
Debajo del asiento se empezó a formar un charquito de agua sucia que goteaba de las suelas de mis zapatillas. No sólo no lo limpié, sino que me encargué de sonreír mientras ensuciaba el suelo. El señor de enfrente pensó que me estaba acordando de un chiste.
Tú sigues viva en algún lugar, besándote con otro, intentando parecer menos pura de lo que eres. Tú sigues intentando ignorarme, y de vez en cuando me dices algo bonito. A mí, la verdad, me da igual: pero maldita la gracia que me hace sonreír cuando leo que me quieres.
Tú estás lejos, y no sólo de mi piel. Estás lejos del charquito de agua sucia de mis pies.

1 comentario:

  1. Me gusta tu blog. Tus entradas son un punto de vista... digamos diferente, aunque no por ello interesante. Pero difiero con el título de tu blog. Esto no lo escribe alguien que sea un inútil, a pesar que quieras serlo.

    Un saludo,
    Selene.

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